La habitación era cómoda y acogedora.

La experiencia no fue la mejor. La habitación tenía mosquitos, y a pesar de que llevé insecticida, no funcionó. Fui a recepción a pedir ayuda y nunca la recibí. Además, el baño olía a azufre y la presión del agua no era la más adecuada, lo cual fue decepcionante. Para colmo, la puerta de la habitación no llegaba al suelo, lo que dejaba entrar polvo y ruido.

Pregunta por recomendaciones de platos locales, la comida me sorprendió bastante. Asegúrate de disfrutar el café y las galletitas disponibles todo el día.

Desayuno casero para recordar

El personal era encantador, siempre dispuesto a ayudar y brindando un servicio excepcional. La habitación era limpia y cómoda, perfecta para relajarse después de un día ajetreado. Cada mañana, despertábamos con el delicioso aroma del desayuno, una verdadera joya que mejoró nuestra estancia.

Desafortunadamente, el baño tenía algunos problemas de mantenimiento y el agua a veces tardaba en calentar. Hubo un par de noches en las que el ruido de la calle se sintió un poco más fuerte de lo esperado, lo que afectó el descanso.

La habitación Standard King es cómoda y tiene una buena iluminación, perfecta para un descanso después de un largo día. El café y las galletitas disponibles las 24 horas son un excelente detalle que realmente mejora la experiencia de hospedaje.

En esta ocasión, la estancia no fue tan placentera. Hubo un notable ruido por las noches, probablemente de otros huéspedes, lo que dificultó el descanso. Además, la puerta del baño parecía dañada y el wifi no funcionaba adecuadamente, lo que añadió más inconvenientes a la experiencia. La falta del despachador de papel higiénico es otro punto que podría mejorarse, especialmente considerando que es un hotel familiar.

el hotel parecía prometedor, pero el baño olía a azufre y hubo mosquitos, no tuve suerte. además, pensé que sería tratado de manera especial, pero no, ni siquiera un simple detalle de cortesía al llegar, sólo ruido por doquier y mala atención. sinceramente, casi escribí una buena reseña, pero no pude. una pena.

La habitación tenía partes con mojo.

tuvimos un pequeño problema con el aroma de limpieza que no nos gustó, pero rápidamente olvidamos eso. el wifi era excelente , y la atención del personal fue increíble. disfrutar de café y galletitas las 24 horas fue un lujo.

Ay, las maravillas culinarias que descubrí! El embutido local en Aquiles es de otro mundo, y sus snacks son perfectos para iniciar la fiesta. La habitación estaba súper limpia y cómoda, y el detalle de tener café y galletitas disponibles a cualquier hora es lo mejor.

Aunque el ruido de la habitación de al lado fue un poco molesto, eso no opacó todo lo bueno de mi estancia. Aún así, la vibra del lugar y la amabilidad del personal brillaron.

Lo recomiendo para familias

La atención que recibimos fue increíble, especialmente de Graciela y Alicia, nos hicieron sentir como en casa. Y no puedo olvidar mencionar el café y las galletitas disponibles las 24 horas, esos pequeños detalles siempre caen bien ya sea de madrugada o después de un largo día.

No fue particularmente barato, pero igual valió la pena.

Encontré que el lugar tiene un buen acceso y no es ruidoso. Al dejar el auto frente a la habitación, fue muy práctico. Me dejaron agua de cortesía. Aunque el aroma del baño no fue agradable, el personal fue amable y se notó atención al cliente.

El baño le faltaba mantenimiento. Había un olor desagradable en el área.

Fue un lugar ideal para una noche en Guadalajara con una buena relación calidad precio. El detalle de tener café y galletitas disponibles todo el día hizo que la estadía fuera más agradable. Recomiendo preguntar por recomendaciones de lugares cercanos a visitar.

Estancia placentera gracias a la amabilidad del personal

Disfrutamos de la atención excepcional de Graciela Espinoza y Alicia Aguilar, quienes nos recomendaron platos deliciosos del hotel y lugares cercanos. El café y las galletitas disponibles las 24 horas fueron un detalle muy apreciado. La limpieza y la comodidad de nuestra habitación hicieron de nuestra visita una experiencia memorable.

la limpieza era excelente. la atención del personal, especialmente la recepcionista, hizo que nos sintiéramos como en casa. el estacionamiento justo afuera de la habitación es un punto a favor.

el aroma de la limpieza. a veces un poco fuerte.

La atención del personal en aquiles fue excepcional, siempre con una sonrisa y dispuestos a ayudar. La habitación que usé era enorme y tenía un jacuzzi increíble. Además, la limpieza y la comodidad fueron notables. Siempre hay café y dulces disponibles, lo que me encantó. Muy cerca de una estación de trenes, lo cual es súper conveniente.

recomendado

La habitación era de tamaño normal, la cama Queen muy cómoda. Las sábanas y toallas estaban limpias. Me gustó que te dejaban agua de cortesía y jabones en el baño. Lo mejor fue que podíamos estacionar el auto justo frente a la habitación, súper práctico. Aunque el aroma de limpieza no me convenció del todo, el lugar era tranquilo y no había ruido. ¡Qué bien tener café y galletitas disponibles todo el día!